Para muchos, las vacaciones de verano son un sinónimo de playa. Descansar junto a la orilla del mar con un libro o un periódico, jugar a las palas o tomar una cerveza en el chiringuito son algunos de los pasatiempos más habituales de los veraneantes. Pero también es posible combinar unas relajantes vacaciones en la playa con itinerarios y visitas culturales para descubrir el patrimonio histórico y artístico del lugar elegido. A continuación, encontrarás algunos destinos ideales para unas vacaciones de cultura y playa.
Mallorca: Descubre la Cultura Talayótica
Si reservas un hotel en Mallorca podrás disfrutar de un viaje completo. La isla no solo ofrece unas playas espléndidas, como Cala Varcas, en Manacor, o la playa de Formentor en Pollensa, donde podrás relajarte junto a sus límpidas aguas, sino que cuenta también con una gran oferta cultural. Explora sus emblemáticos monumentos prehistóricos, como el poblado talayótico de Son Fornés, con dos talayots unidos entre sí por una muralla y varias viviendas; contempla la catedral de estilo gótico de Palma de Mallorca o acércate al castillo de Bellver, a poca distancia de la capital. Merece la pena visitar el castillo neogótico de Bendinat o el Monasterio de Lluch, al que se acercan numerosos peregrinos no solo para venerar a la Virgen de Lluc, sino también para recorrer su bonito jardín botánico.