Hace tres años tuvimos la oportunidad de celebrar el 800 aniversario del nacimiento de la epopeya del Cantar de Mío Cid, realizando la particular Ruta del Cid, el recorrido que el gran héroe español realizara en el siglo XI.
Durante el pasado 2007 fueron muchas las ciudades españolas relacionadas con el Cid que organizaron conciertos, exposiciones y torneos medievales. La Ruta del Cid comprende unos dos mil kilómetros a través de las provincias de Burgos, Guadalajara, Soria, Zaragoza, Teruel, Castellón, Valencia y Alicante, en las que podréis seguir las huellas del gran caballero.
Todo comenzó en Vivar del Cid, lugar de nacimiento de nuestro gran caballero. Su nombre del Cid proviene del árabe As-Sayyid, que significa Señor. El Cid fue desterrado por el rey de Castilla Alfonso VI en el año 1081. Su primera noche en el exilio la pasó en Burgos. Precisamente, nuestro héroe y su esposa están enterrados en la Catedral de Burgos.
Sin embargo, en un principio los restos del Cid estuvieron enterrados en el Monasterio de San Pedro de Cárdena. Aún hoy se conservan los sarcófagos de piedra donde descansaban los restos del Cid.
Antes de llegar a Zaragoza, el Cid se detuvo en Santo Domingo de Silos, uno de los monasterios más bellos y significativos de España. Si lo visitáis, tener en cuenta que los monjes cantan en el monasterio cinco veces al día.
Como no podía ser menos, la ruta hace un recorrido por interesantes castillos, como los de Burgo de Osma y Gormaz. Tampoco debéis olvidaros de visitar estos dos pueblos medievales y pintorescos. También tenéis que acercaros al Castillo de Berlanga de Duero, donde el Cid se alojó varias noches. Curiosamente, son pocos los turistas que visitan estas impresionantes fortalezas.
Poco a poco entraremos en las montañas escarpadas del antiguo reino de Aragón para llegar hasta las estribaciones de Teruel. Esta zona está salpicada de pequeños pueblos de piedra con olor a leña y rodeados de densos bosques de pino piñonero. Estos pueblos de montaña presentan un laberinto de callejuelas de piedra que impresionan. De entre ellos no os perdáis Rubielos de Mora, Mirambel o Albarracín, considerado uno de los pueblos más bonitos de España.
En el año 1086 se produjo un pequeño acercamiento entre el rey Alfonso VI y el Cid, después de que el héroe castellano lograra algunas victorias importantes sobre los musulmanes. De hecho, marchó sobre Valencia y la ganó para los cristianos, convirtiéndose en Señor de Valencia hasta su muerte el 10 de julio del 1099.
Cerca de Valencia y Castellón podéis disfrutar con los castillos de Sax y Villena, además del precioso pueblo de Bocairent. Sí se sabe que el Cid estuvo en las Navidades del 1088 en Elche. Cualquiera de estos lugares os acercará a la figura de este caballero legendario.
Foto Vía Jesuscm
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