El Paseo de Pereda en Santander

Había leído en muchas ocasiones que Santander es una de las ciudades más bonitas de España. Creo que no le falta demasiada razón al dicho, ya que cuando estás allí descubres un precioso rincón asomado al Cantábrico. El paseo marítimo que cubre toda la bahía es uno de los enclaves que no debe faltar en vuestra visita a la ciudad.

Si reservamos nuestros vuelos a Santander, y nos alojamos en la ciudad, seguro que en más de una ocasión daremos una vuelta por el clásico Paseo de Pereda. Un lugar emblemático en Santander, lleno de turistas y lugareños. Tan transitado y admirado que, en 1985, fue declarado Bien de Interés Cultural.

Paseo tranquilo y placentero el que se puede hacer por aquí, discurriendo frente al mar impetuoso que bulle día a día en Santander. Este paseo se extiende desde el Puerto Chico hasta el Edificio de Correos, más concretamente hasta la Plaza de Farolas, uno de esos rincones del casco antiguo que tuvieron la suerte de salvarse del terrible incendio que afectó a Santander en 1941.

Excursiones desde Santander

Santander desde Somo

Sencillamente, me encanta Santander. Por muchas cosas, por ser ciudad señorial y elegante, bella y amplia bahía, por sus playas, su encanto, por ser una ciudad cosmopolita y alegre, su vida nocturna, su carácter popular y tradicional, el Barrio Pesquero… Son tantas cosas las que me llevan a Santander que citarlas todas aquí no daría lugar, por espacio y por tiempo.

Sin embargo, siempre que reservo mis vuelos baratos a Santander, debo darme una escapada por los alrededores de la ciudad. Porque la belleza santanderina diríamos que se expande, marca un radio de acción bastante grande. Hoy tomaremos un coche y haremos una pequeña excursión alrededor de Santander.

Podemos salir por la carretera del faro, que rápidamente de abre a la izquierda, en dirección a Monte y a Cueto, para llevarnos al Seminario Mayor de Monte Corbán, levantado en el siglo XV por los jerónimos. Si os paráis a hacerle una pequeña visita os aconsejo visitar su pequeño patio, que es un claustro renacentista, y otro claustro más adentro, más grande y de estilo barroco.

Playas de Santander

Playa de Mataleñas

Qué tendra Santander que, cada vez que tengo la suerte de visitarla, siempre me traigo un recuerdo hermoso, una fotografía que enseñar y guardar en el mejor de los álbumes. No me extraña que para muchos sea la ciudad más bonita de España, la más elegante. Mirando hacia el Cantábrico, como una dama del mar, con sus edificios que mezclan a la perfección lo antiguo y lo moderno.

Ya tengo ganas que llegue el verano para disfrutar de sus playas. Siempre reservo con suficiente antelación mis vuelos baratos a Santander, para no tener luego problemas. Ya en primavera la gente de Santander aprovecha el más mínimo huequito de sol para acercarse a la playa. Bien temprano por la mañana, después de comer, o a la salida del trabajo por las tarde. Cualquier momento es bueno para deleitarse con el sonido de las olas.

Y eso que el Cantábrico no suele ser un mar muy tranquilo que digamos. Fuertes oleajes y vientos sacuden siempre este parte del litoral español. Aún así, tenéis que venir a Santander y sus playas. Quien no ha oído nunca hablar de la célebre Playa del Sardinero, playa en donde lo mismo te puedes dar un baño tranquilo, al sur de la Magdalena, como puede practicar algo de surf.

Las Cuevas de Altamira en Santillana del Mar

Cuevas de Altamira

Las fabulosas Cuevas de Altamira se hallan en la localidad de Santillana del Mar, treinta kilómetros al oeste de Santander. Como suele pasar a menudo, fueron descubiertas por casualidad. En 1868, Modesto Cubillas, un cazador de la zona se tropezó con ellas, pero no fueron exploradas hasta 1875, por un noble de Santander llamado Marcelino Sanz de Santuola. De todas formas, fue su hija, María de Santuola, quien descubrió las maravillosas pinturas en 1879.

Sin embargo, eran de una calidad tan sorprendente, y estaban tan bien conservadas, que los especialistas dudaron de su autenticidad. No fue sino hasta comienzos del siglo XX cuando finalmente fueron aceptadas como auténticas, al encontrarse restos de la edad de piedra en la zona. Las pinturas de las Cuevas de Altamira son la prueba más excepcional de la cultura magdaleniense en el sur de Europa.

Las pinturas, en su mayoría, representan bisontes, pero además hay dos jabalíes, algunos caballos, una cierva, figuras de seres humanos con cabezas de animales, junto con huellas de las manos y otros contornos. Sólo aparecen los colores negro, rojo y ocre. Es impresionante ver cómo los artistas de la época han reproducido minuciosamente las características físicas de cada animal.

Santander, la elegancia del norte de España

 Santander

Hay muchas razones por las cuales viajar a Santander. Los meses de verano son la mejor época para ello. Pasear por la ciudad es un encanto, sobre todo con el buen tiempo, y nos permite acercarnos a los lugares más interesantes de la capital cántabra.

Si queréis visitar Santander no debéis dejaros atrás sus barrios más coloridos, como el Barrio Pesquero, con restaurantes de marisco de gran calidad. También tenéis que pasear por el Paseo Marítimo, o la Avenida Reina Victoria. Si consideráis la posibilidad de visitar la costa, lo mejor es un crucero desde la Estación Marítima de las Reginas.

Muchos turistas se agolpan en la Avenida Reina Victoria, por las maravillosas vistas a la bahía y los jardines. Quizás sea la zona más pintoresca del centro de Santander, y la mejor manera de llegar a playas como la del Sardinero o la Magdalena. Otros lugares de interés a los que acceder desde esta avenida son el Gran Casino y la Plaza de Italia.