La Castilla profunda es aún una tierra que descubrir. Y es que la zona contiene un potencial turístico más grande de lo que se cree a primera vista. Tal es el caso, por ejemplo del pueblo que presentamos hoy, a saber, el pueblo de Ayna en la provincia de Albacete.
Situado en lo más profundo de la garganta que forma el río Mundo (nombre curioso para un río), en un abrupto y singular enclave natural, el pueblo de Ayna es uno de los municipios más bonitos y pintorescos de toda la provincia de Albacete.
Debido a su situación, excepcional localización, y con el fin de aprovechar la reducida superficie del que disponen, los habitantes de Ayna han utilizado históricamente para cultivar diversas terrazas excavadas en las laderas del monte.
Como parte importante del pueblo, también tenemos su patrimonio histórico y artístico. Por ejemplo, podremos visitar la bonita ermita de Nuestra Señora de los Remedios, donde su máximo interés reside en el artesonado de tradición mudéjar que cubre toda su nave. También podemos ver en Ayna el castillo de la Yedra, de origen islámico y que se situá un poco alejado del núcleo urbano. Fuera del pueblo también, más concretamente a su salida, podremos disfrutar de las vistas que nos ofrece el mirador del Diablo, un mirador de obligada visita por la espectacularidad de sus panorámicas. Otro de los lugares atractivos del lugar es la cueva del Niño, que contiene pinturas rupestres del paleolítico.