Es difícil encontrar un lugar que aúne con tanta belleza y elegancia dos estilos como el renacimiento y el barroco. Alcalá de Henares, cuya Universidad y centro histórico son Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1998, es un destino clave desde el punto de vista cultural en España.
Y no sólo porque aquí naciera un 29 de septiembre de 1547 Miguel de Cervantes, sino también precisamente por su universidad, fundada por el cardenal Jiménez de Cisneros a principios del siglo XVI, lo que convirtió a Alcalá de Henares en la primera ciudad universitaria planificada del mundo.
Hay muchos hoteles en Alcalá de Henares en los que alojarse y disfrutar así de una ciudad maravillosa. Una visita a la misma la podemos comenzar por ejemplo recorriendo el Colegio de San Ildefonso, sede de la Universidad, y sin lugar a dudas el edificio más destacado de todo el complejo.
Construido en el siglo XVI, es ampliamente conocida su fachada plateresca. Si accedemos al interior hemos de visitar el Paraninfo y, especialmente, la Capilla de San Ildefonso. Una lástima que perdiera parte de su encanto original, aunque aún hoy sigue siendo toda una joya.
A este edificio poco a poco se le fueron añadiendo otros más, formando hoy un complejo de 25 colegios menores. Si bien en sus orígenes tuvo una enorme repercusión, a partir de mediados del siglo XVII declinó el número de estudiantes matriculados hasta que, en 1836, fuera trasladada a Madrid. En 1977 reabrió de nuevo sus puertas.
Desde la Universidad podemos ir hasta la Iglesia Magistral, que se levanta en el lugar exacto donde fueron degollados en el año 304 los Santos Niños Justo y Pastor. En el interior del templo se conservan, en la cripta y en unas urnas de plata del siglo XVIII, las reliquias de estos santos.
Un centro histórico como el de Alcalá de Henares es para visitarlo y recorrerlo con tiempo. Cuenta con varios edificios de gran interés, como el Palacio Arzobispal, el Convento de la Madre de Dios del siglo XVI, el Convento de San Bernardo con su gran cúpula barroca de 1618 y, por supuesto, la Casa de Cervantes en la Calle Mayor, que en realidad es una reconstrucción de una vivienda del siglo XVI sobre la casa en la que nació el autor de El Quijote.
Sin olvidarnos, claro está, de otras iglesias y conventos como el de Santa Úrsula, el de la Consolación (ambos del siglo XVI) o la famosa Casa de la Entrevista, lugar en el que los Reyes Católicos recibieron a Colón antes de su viaje a América.
Como podéis comprobar, Alcalá de Henares merece muchísimo la pena. Os recomendaríamos, por ejemplo, el hotel Evenia Alcalá para alojaros durante vuestra visita, un magnífico establecimiento de tres estrellas, situado en pleno centro histórico, diseñado en un edificio del siglo XVI. Así aunaréis el esplendor de antaño con las comodidades más modernas.
Foto Vía Ir de tapeo
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